Ayayema, espíritu del mal, es muy temido por los qawashkar, dispone de las fuerzas naturales y en especial del viento del noroeste, que vuelca las canoas. El alarga las llamas de la fogata hasta quemar la cabaña; lo mismo, al crepitar, sus brasas queman la piel desnuda. Ayayema mora en los pantanos y cuando el campamento ésta dormido toma posesión de los indígenas. En su avance subterráneo penetra en las cabañas e impone su presencia maléfica en los sueños, causando las enfermedades y las muertes.
Tiene olor a pobredumbre. Cuando del suelo de al cabaña empiezan a emanar olores, es signo de al presencia de Ayayema, entonces es preciso mudarse de campamento.